"Te falta mala Hostia"

Contexto: Evaluación de Conocimientos y Habilidades con mi jefe. ayer a las 19:45

Todo va bien. En todos los parámetros el gap entre la auto-evaluación y su percepción es mínimo. (0,2), lo que equivale a que en las definiciones se incorporan conceptos como siempre casi siempre, nunca o casi nunca, frecuentemente, algunas veces y ocasionalmente. La diferencia entre algunas categorías es mínima, y muy subjetiva sobre todo para quien los conceptos absolutos de siempre y nunca, “les crujen” los esquemas. Todo bien.

Y como colofón, como guinda, tras haber comentado mis habilidades interpersonales, incluso todas aquellas que se intuyen pero que por mi puesto actual ni se pueden poner a prueba, -pero que igualmente se evaluan- las dotes de liderazgo, la capacidad de influir sobre las personas, etc, etc… me dice que “lo que te pasa es que te falta mala hostia”

Vaya. Por fin la clave del obstáculo para mi desarrollo profesional. Ya se por qué no soy Director General. o CEO, CFO, CIO....

Y repite “no me malinterpretes, pero es que es eso, que te falta mala hostia”

¿pero hay margen para malinterpretar un mensaje tan claro?

Reconozco que no me sulfuro facilmente, que los lunes tengo la misma cara gane o pierda el Madrid, el Atleti, o el Barça, Alonso o Hamilton – no me gusta el futbol, ni sigo la liga, ni tampoco la F-1-, no creo que “por cagarse en todo” o gritar “no me jodas” se solucionen los problemas, ni mejore su pronóstico, reconozco que digo buenos dias y buenas tardes, cuando me cruzo con alguien en los ascensores y hasta deseo “que tengas un buen fin de semana” cuando me voy el viernes. También pido las cosas por favor y doy las gracias cuando me las dan. Así me lo enseñaron, y así lo hago. “Debe ser eso por lo que no demuestro tener mala hostia.”

Además cuando las cosas no salen como me gustaría y se me cruzan los cables –que dedicándome a lo que me dedico en mi negocio también pasa-, respiro hondo, cuento hasta 10 y si no mejora me doy una vuelta a buen paso alrededor de la manzana. En 10 minutos lo peor ha pasado. Huyo del stress de los atascos usando el transporte publico, y además practico deporte, body-balance (tipo tai-chi y Yoga) varias veces por semana. Y los fines de semana tengo un rico espectro de hobbies y aficiones –de ocio sano- que cultivar y que canalizan y reequilibran mi adrenalina, cortisol y endorfinas. Last, but not least, tengo una familia estupenda, una mujer que es una compañera que me apoya y tres hijas que son tres regalos. “A lo mejor por eso No tengo mala hostia”.

Es sólo una frase. Poco afortunada pero sólo una frase. La frase, es sólo una suma de palabras, que a su vez reflejan ideas. Pero las frases, generan –o son síntoma de- actitudes. Esas actitudes se concretan en acciones. La práctica repetida de las acciones se convierte en hábitos, y estos replicados, y fomentados –por ejemplo al evaluar a los subordinados-, acaban por convertirse en Cultura de empresa.
Sin sacar las cosas de quicio, “es sólo una frase” .En el fondo entiendo su mensaje subyacente, y hasta tengo que darle la razón. Me falta. Pero no voy a cambiar mi forma de ser ante semejantes estímulos. Creo firmemente que entre todos podemos hacer de las empresas un lugar mejor para trabajar, y que esas relaciones distintas, redundan en mejores Resultados. Creo que se puede llegar a Director General -y hasta a CEO- con esa carencia. Y además, soy más feliz sin mala…onda.